El color de un pescado guarda un delicioso y saludable secreto. No solo es un asunto de apariencia, sino que está íntimamente relacionado con el sabor y los beneficios nutricionales que nos puede ofrecer. Y nosotros podemos aprender a mejorar nuestra dieta descubriendo el valor de los pescados azules.

Los pescados azules, llamados popularmente así por su carne oscura, son reconocidos y apreciados por la gran cantidad de minerales, proteínas, vitaminas y aceites naturales que poseen. A diferencia de los pescados de carne blanca (lenguado, perico, congrio), que solo acumulan aceite en el hígado, los pescados azules poseen una alta concentración de grasas (aceites) en su carne, lo que les da un color y sabor muy particulares.

Los aceites propios de los pescados azules son muy beneficiosos para nosotros. Por ejemplo, aceites esenciales como el omega-6 y el omega-3, los cuales no pueden ser fabricados por nuestro cuerpo y solo pueden obtenerse a través de la comida. Así, mientras que un pescado blanco posee 0.3 gramos (por cada 100 gramos) de omega-3 en su carne, un pescado azul como el jurel presenta 3.3 gramos. ¡Diez veces más!

El omega-3 es muy apreciado por los beneficios que ofrece:

Mejora la vista y nos ayuda a pensar mejor. Ayuda en el desarrollo saludable del cerebro y ojos.

Reduce el riesgo de problemas cardíacos, reduce la presión arterial además de prevenir coágulos en la sangre.

Reduce el riesgo de padecer enfermedades mentales. Estudios han demostrado que las personas que consumen más pescados azules tienden a ser menos susceptibles a sufrir de demencia o Alzheimer.

Favorece el desarrollo del sistema nervioso de los bebés e incluso disminuye las probabilidades de padecer cáncer.

El mar peruano posee una gran variedad de pescados azules, tales como la anchoveta, lacaballa, el jurel o el  bonito. Cada uno de ellos tiene un sabor característico, muy apreciado por cocineros y comensales, lo que los hace excelentes para un buen escabeche o sudado.

Por todas estas ventajas, se recomienda consumir pescado dos veces por semana y así aprovechar los beneficios que nos brinda el mar. No en vano los pescados azules fueron base de la alimentación de civilizaciones antiguas como Caral y hoy son parte de la rica cultura culinaria del país.